Un libro... ¿Qué se nos viene a la cabeza cuando pensamos en un libro?
Un libro lo podemos comparar con un cofre del tesoro, con esas cubiertas duras y llamativas que nos llaman y atraen haciendo que necesitemos saber que hay dentro de él.Y, cuando lo abrimos... ¡¡BOOM!! Estalla la magia, un mundo de imaginación, de fantasías, de cosas que sentimos que necesitamos saber aparece ante nosotros. Pero... ¿Cómo se nos presenta ese mundo? es un mundo sin color, en blanco y negro, un mundo en el que sus habitantes son letras que van de un lado a otro buscando a sus compañeras para formar palabras que den sentido y vida a la historia.
Pero no os dais cuenta que mientras vosotros, sí sí ¡¡Vosotros!! Vosotros que estáis entendiendo todo lo que os estoy diciendo y mientras, hay millones de personas que no son capaces de dar sentido a este manojo de palabras simplemente porque desconocen nuestro idioma o incluso por que son analfabetos.
Sin embargo, tenemos otra opción, un recurso diferente que lo puede entender todo el mundo, la IMAGEN. La imagen es algo que a pesar de nuestra cultura, idioma o país vamos a poder entender e interpretar todos, seguramente la interpretaremos de diferentes formas pero ese es el poder de la imagen: Todos pueden tener su propia interpretación con una misma imagen.
Ahora vamos a hacer un viaje en el tiempo para descubrir la importancia de la imagen:
Ya en la prehistoria había un uso de la imagen, aquellas pinturas que decoraban las paredes de las cuevas representando escenas cotidianas, las pinturas rupestres.
Más adelante, en la Edad Media, se uso la imagen como recurso para simbolizar relatos bíblicos en las vidrieras de las iglesias y para representar los carteles de los comercios, ya que la mayoría de la población era analfabeta y así la información que se quería transmitir podía llegar a todos.
Hoy en día hemos dejado de darle tanta importancia a la imagen, por que gracias a la educación ha disminuido el analfabetismo en nuestra sociedad y ya no necesitamos de la imagen como recurso informativo.
De todas formas, como ya he dicho al inicio, creo que un libro que podamos entender todos, posee un gran valor. A este tipo de libros, sin texto, se les denomina libro mudo. Además son libros que tienen un amplio abanico de recursos para introducir al lector en un mágico mundo. Un mundo no necesariamente de color, en el que los protagonistas aparecen y desaparecen cuando a ellos les apetece a través de los márgenes y pliegues del libro. Un mundo en el que un simple punto pueden ser infinitud de cosas vistas a una larga distancia y un sólo color puede transmitir infinitud de sensaciones.
Estos libros pueden dar mucho juego, juego con la doble página: de repente el libro es un espejo y el personaje se ve reflejado en la página de al lado; o representa el mundo real y el mundo de las sombras...
"Sombras" Suzy Lee
|
Una autora/ilustradora que le encanta crear este tipo de libros es Suzy Lee. En la mayoría de sus libros hay una niña protagonista, Suzy Lee dice que esa niña puede ser un reflejo de su infancia, cuando ella era una niña, o puede ser que sea la niña que aún lleva dentro. Algunos de sus libros son: "Sombras", "La ola", "Espejo", "Zoo", "Alicia en el país de las maravillas"...
Espero haber podido introduciros a un mágico mundo en el que no se necesita de letras vacías y sin sentimiento, sino que la imagen acompañada del silencio lo dice todo.
Javier Carilla Pros
No hay comentarios:
Publicar un comentario