En realidad, tenía pensado hablar del cuento que sin duda marcó mi infancia: “Ricitos de Oro”. Pero gracias a la visita a la biblioteca infantil, tras curiosear un poco por las estanterías, me llamó la atención un libro llamado “Lorenzo y el cazo”, el cual, en ese momento hojeé, pero después, no he podido evitar leerlo unas cuantas veces.
En este cuento se reflejan las trabas y dificultades que tiene un niño diferente como es Lorenzo, a través de una metáfora; y es que Lorenzo arrastra un cazo allá donde va. Aparece muy patente uno de los problemas que este tipo de personas tiene en la vida real, es decir, los prejuicios que tenemos y que hacen que sean vistos tan solo como “bichos raros” y su integración no se llegue a dar. Pero como es evidente, Lorenzo también tiene sus cualidades y, afortunadamente hay personas que saben apreciarlas y valorarlo por encima de sus diferencias, ayudándolo a superarse y a ser considerado por sus virtudes más que por sus hándicaps.
A mi parecer, es un cuento que ha de estar presente en todas las aulas, en las bibliotecas infantiles y en nuestras casas, ya que a través de la historia Lorenzo, los niños pueden darse cuenta de la incomprensión que sufren algunos niños que, al fin y al cabo son iguales a ellos.
Pero no solo es una lectura esencial para los niños, sino que, mucho mejor nos iría si los adultos, siendo el modelo esencial de estos, lo leyeran.
Entrada de: ANA ARTIEDA PUYAL
Ya conocía esta historia, y la verdad es que me alegra que me la hayas recordado puesto que la había olvidado y es una digna elección a tener en clase y en casa como bien dices. Estoy totalmente de acuerdo contigo, Ana, puesto que a veces hay que dejar claro que todos somos personas y aunque algunos sean mas capaces que otros todos somos dignos. Y no solo tiene que quedar claro en los niños sino en los adultos que a veces lo olvidan.
ResponderEliminarLorena Arribas Gómez